ECOLOGÍA EMOCIONAL



ECOLOLOGÍA DE LAS EMOCIONES


PRINCIPIOS PARA UNA VIDA
EMOCIONALMENTE ECOLÓGICA:

“Padecemos mayor
contaminación
en las emociones que
en la atmósfera”



De la misma forma que ya
no consideramos admisible
que alguien lance residuos
tóxicos y contaminantes
a un río, porque sabemos
que los peces y el río
van a morir,
no podemos permitirnos el
lujo de ir lanzando
partículas emocionales
tóxicas al exterior.

Las personas y
la naturaleza
son sistemas
abiertos totalmente
interdependientes.

Existe un clima
emocional global
que se está deteriorando
cada vez más debido a
nuestro analfabetismo
emocional y a nuestra
irresponsabilidad.

El clima emocional va
a depender de la suma de
las aportaciones de
cada uno de nosotros.



El calentamiento
emocional global se
manifiesta en multitud
de síntomas:
aumento de las
agresiones verbales,
físicas, psíquicas y
morales, estrés, aumento
de patología
ansioso-depresiva,
racismo, corrupción,
guerras, terrorismo,
enfermedad.

Ya es hora de efectuar
cambios preventivos
en lugar de
vernos obligados a
recurrir a cambios
catastróficos, a veces,
demasiado tarde.

La Ecología Emocional
presenta el modelo
C.A.P.A. de ser humano:
persona Creativa,
Amorosa, Pacífica,
Autónoma.
Estos cuatro ejes deben
desarrollarse de forma
sincrónica y equilibrada.



PRINCIPIO DE RESPONSABILIDAD
EN LA AUTOGESTIÓN EMOCIONAL:

Podemos ser parte de la
solución o parte del
problema de la humanidad.

No podemos vivir inundando
a los demás con nuestra
basura emocional.
El precio es demasiado caro.

PRINCIPIO DE PREVENCIÓN:

“Hoy estamos otra vez en
una de estas situaciones
decisivas en que la
diferencia entre la
solución violenta y
la solución anticipada
puede significar la
diferencia entre la
destrucción y el
fértil desarrollo
de nuestra civilización”
(Erich Fromm).

BUEN USO Y AHORRO
DE ENERGÍA EMOCIONAL:

Elegir bien los objetivos
y las personas
en quienes invertimos
energía emocional.
No despilfarrarla.



Centrarnos en aquello
que podemos controlar y
mejorar,NOSOTROS MISMOS,
en lugar de empeñarnos en
cambiar a los demás.

USO DE FUENTES DE ENERGÍA
EMOCIONAL LIMPIAS,
RENOVABLES
Y NO CONTAMINANTES:

Movernos por el empuje
de la alegría,
la curiosidad,
la confianza,
la valentía,
la generosidad
o el amor,
en lugar de hacerlo
por coacción, por un
falso sentido de
la obligación,
por lo que dirán
los demás, por egoísmo
o interés.

La misma acción puede
dar lugar a resultados
totalmente opuestos en
función de si la fuente
de energía emocional
es limpia o contaminadora.

Creación de espacios
protegidos para especies
emocionales en peligro
de extinción en los
que puedan crecer,
entre otras, la ternura,
el amor, la serenidad
y la gratitud.

Protección del
clima emocional
evitando las
contaminaciones
por quejas, rumores,
insultos,
juicios de valores,
menosprecios.

APLICAR EL PRINCIPIO
DEL RESPETO.

La Ecología Emocional
defiende un modelo
humano psicoecoafectivo:
personas que construyen
un espacio interior armónico
en el cual razón y emoción
unen sus fuerzas fomentando
acciones más empáticas,
generosas y solidarias
hacia los demás
y hacia el mundo.

Si ya comprobamos que un
solo pensamiento negativo
afecta a nuestro organismo
y atrae más de lo mismo,
imagina cómo podrán
afectarnos miles
de millones de ese tipo
de pensamientos que
se reflejan a todo
el Mundo y al Universo.



Tomar conciencia que
cada movimiento mental,
físico o espiritual,
hará una diferencia,
a favor o en contra,
para el desarrollo
de la humanidad.

Es nuestra responsabilidad
reflejar el Amor
que vamos siendo.

Vos elegís quién
estás queriendo Ser.
Desde el amor y
al servicio del Amor.

Basado en un artículo de
Sergio Sinay



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8 comentarios:

Bernardo dijo...

La libertad del ser es muy importante …. Estar libre de las ataduras que nos producen los miedos, de esta vida u otras, creo q es un factor muy importante ….. no nos condicionamos y podemos expresar todos nuestros sentimientos ….. esa libertad interior nos permite crecer y evolucionar, a nosotros y a los q estén a nuestro lado.

Saludos

Ber

Juanarmas dijo...

Las emociones y los sentimientos, relegados a segundo (tercero, cuarto y...último plano) son fieles indicadores de nuestro mar interior. De hecho, nuestros "guias" deben hablarnos en emociones y sentimientos.

Me ha gustado el mensaje, por cuanto tiene de meditación y verdad.

Gracias.

JuanJo dijo...

Lógicamente, el Ecosistema natural no está desvinculado del Ecosistema emocional.

Lo interesante de esto, es que como partículas que somos dentro del sistema, formamos parte tanto para contaminar la atmósfera, despilfarrar energía o ensuciar los ríos, de forma individual, de la misma forma que emocionalmente podemos "ensuciar" el entorno social con nuestras malas conductas.

Por tanto una actitud activa orientada en el sentido contrario a éste, revertirá en un mundo más límpio en todos los sentidos.

Interesantes recomendaciones, y agudo el análisis hecho en la presentación, con simil Ecológico.

BeTina dijo...

Gracias Bernardo, Juan y JuanJo por participar con sus comentarios!.
Justamente, celebrando el "día de la Tierra" y pensando en la Ecología, si no empezamos por nuestras emociones, difícilmente podamos no contaminar.
Estoy segura que con una psicología sana, llevando una vida emocional ecológica, lo demás viene sólo.
Si nuestra mente está limpia, también lo estará nuestro medio ambiente.
Saludos!!
BeT

Unknown dijo...

Partiendo desde posturas aparentemente asimiladas por la Ecología, hoy el hombre es una mera amenaza para sí mismo: rezan las diversas corrientes neoconservadoras y ultrapuritanas que arrancan de un ecologismo simplista y superficial. Rebuscando en un baúl panteísta, he encontrado la necesidad humana de un ateismo natural a cielo abierto: terra mater. Fascinante espiritualidad de Lutero Toro Sentado. Corazón de Montaña ligado a la naturaleza salvaje. Ser la ínfima parte del organismo planetario. Tierra, mar y aire —Gaia— son un complejo organismo individual que posibilita y favorece la existencia. Gozar y amar la Tierra, e interiormente preservar la belleza paisajística de todos los territorios. Coexistir y cooperar con este planeta, relacionarse de forma compleja con sus suelos, sus aguas, sus plantas y sus animales. Históricamente, el ser humano ha destruido en muy poco tiempo multitud de entornos naturales que tardaron millones de años en desarrollarse; actualmente no existe ninguna zona en el planeta que no esté influenciada por las acciones de los seres humanos. ¡Y este blog afecta a la calidad medioambiental del planeta; holísticamente, hay una relación estrecha entre esta obra y la destrucción del medio ambiente! Sin amanuenses medievales, esta obra se difundirá por obra y gracia de las industrias química, metalúrgica, petrolera y de ingeniería. La sostenibilidad del planeta Tierra sólo es posible cambiando los fundamentos del actual sistema económico, social y político (Sistema); es necesaria una hipercrítica de la actual forma de vida occidental para solucionar los graves problemas medioambientales presentes y futuros. La actual utilización de los recursos, limitados (agotables), es irracional. El beneficio empresarial es lo que más interesa: un ilimitado crecimiento económico a escala planetaria. Pero si el Sistema es limitado medioambientalmente, es inviable tanto el actual crecimiento exponencial de la producción agrícola, industrial y tecnológica como la misma sociedad de consumo. La terra mater ya no tolera los actuales niveles de producción y consumo globales; determinados sistemas ecológicos naturales han dejado de absorber y reelaborar las sustancias de desechos propias de la producción y consumo humanos: nuestros desechos están colapsando muchos de los mecanismos que la misma naturaleza utiliza para absorber y finalmente eliminar dichos residuos. Somos incapaces de conformar ecológicamente el entorno a las necesidades básicas globales, por lo que el resultado de nuestra interacción con el medio ambiente es desastrosa. No se trata de mantener intacto el medio ambiente natural, sino de modificar ecológica y sosteniblemente los ecosistemas cuando sea necesario para mejorar las condiciones de vida de los seres humanos. Es necesario un radicalismo verde que busque la estabilidad medioambiental a través del conocimiento de nuestro entorno natural; el ser humano forma parte de la naturaleza, el mundo viviente o el medio ambiente: lo orgánico y el entorno donde es posible la vida.

¿Soy responsable del deterioro del medio ambiente? ¡Sí, pero no vivo con un complejo de culpa! Los conservacionistas rayan el fascismo cuando arremeten contra su propia naturaleza —homo faber. Vivir es rectificación o cambio; no se trata de expiar nuestras culpas como responsables de la pérdida de la capa de ozono o del peligro nuclear. ¡No es un circo para puristas y estigmatizados! Sí, debemos evitar todo aquello que es negativo (lo no-constructivo para el ser humano y nuestro entorno). Sabemos qué nos duele, qué nos enferma o qué nos mata; evitemos la satisfacción y la autocomplacencia desde los innumerables planteamientos teóricos utópicos; abracemo la realidad en toda su complejidad, involucrándonos positivamente con el Cambio. Desde el oscurantismo medieval: ¡La ciencia y la alta tecnología no pueden protegernos del reverso de la naturaleza: tempestades, inundaciones, enfermedades, sequías, heladas, plagas! Es imposible controlar a la terra mater, aunque sí podemos explotar y agotar completamente todos los recursos naturales, lo cual supondría un desequilibrio del orden natural que incrementaría potencialmente dicho reverso de la naturaleza. ¡No hay bienestar humano si seguimos potenciando el crecimiento económico desde el industrialismo rampante! Los medios de producción que se están utilizando desgarran —¡con su ética materialista del trabajo!— el medio ambiente sin contemplaciones: el hombre versus beneficio. Somos seres sociales y ecológicos: pura relación. Y equilibrados, sin excesos, tomaremos la Tierra que nos dará existencia o vida. Nuestra relación con la naturaleza no debe ser dañina ni destructiva, de ello depende el porvenir de las generaciones futuras. Debemos conocer profundamente nuestra relación con el mundo natural.
El pasado y el presente del ecologismo queda definido como un vano movimiento sociopolítico apto para puritanos deseosos de encontrar espacios puros, inocentes o vírgenes. Se trivializa la relación de los organismos con el medio ambiente: de la filosofía verde a los informes sobre compromiso medioambiental de grandes empresas. El hombre versus naturaleza se limita a un mero conjunto simbólico repleto de tipificaciones supuestamente reveladas en nombre de la ciencia: natural, cósmico, biológico, orgánico. Se huye de la complejidad de todo cuanto nos rodea, enfermos de simplificaciones. Sobreviviremos siempre y cuando la sociedad sea también sostenible, al margen de los conflictos y fricciones sociales que aparentemente dañan dicha sostenibilidad. El desarrollo de modelos de vida alternativos para las sociedades no-ecológicas, con el propósito de crear una sociedad más justa e igualitaria, supondrá un trauma social a gran escala. Quienes nos sentimos incómodos ante el estado actual de las cosas, abogamos por una visión constructiva y positiva de las futuras relaciones del ser humano con el medio ambiente natural.

BeTina dijo...

Pierre Marie! bienvenido a Mis instantes y gracias por tu comentario.
Coincido contigo que a través de instituciones y sistemas no encontraremos la salida a toda esta autodestrucción masiva reinante. Lamentablemente, la experiencia histórica de la humanidad nos lleva a la conclusión de que las instituciones comienzan como una iniciativa hacia un "buen fin" para luego transformarse en receptores de poder. Creo que la salida, como bien planteas tu, es empezar a sentirnos parte de la naturaleza y no dominadores de ella. Tener verdadera conciencia de como son las cosas.
El camino está en uno mismo, empezando por nuestros pensamientos, nuestra psicología y actitud frente a nosotros mismos y la vida, lo demás se dará por si mismo. Pretender cambiar al mundo y seguir parados en el mismo lugar no sirve de nada. El cambio y la revolución son internos.
Saludos y gracias por dejar tu opinión:
BeT

Pilar dijo...

Acabo de leer muchas verdades... últimamente se nota mucha basura emocional por todas partes, y por supuesto nos acaba afectando a todos, hay más sentimientos negativos que positivos, los niños creen que lo positivo es "malo"o "aburrido",y en cambio lo negativo lo leen como "divertido" o "Bueno"...
La unica forma que tenemos de "contraatacar" creo que es enseñanándoles a vivir en positivo,vivir mucho la naturaleza, fomentar la amistad,el respeto...
espero que consigamos cambiar el chip poco a poco, granito a granito, como si estuviéramos contando los de la arena de playa...
un beso primaveral desde aquí...
ah ,me gustan mucho tus fotos , son muy limpias las imágenes de ese otoño que teneis ahí,
un abrazo y gracias por tu comentario en mi blog!

Anónimo dijo...

Querida Bet,
Los textos que has recogido sobre la ecología emocional me han parecido fascinantes y verdaderamente me han sorprendido, ya que no sabía que existían personas que pensaban así, con lo que me ha hecho feliz la mañana.
Te pediría, si te parece bien, que me enviaras bibliografía sobre este tema.
Un abrazo, y te reitero mi agradecimiento por tu blog.